Como venimos diciendo, The Killing es una serie en la que la música cobra especial relevancia y el modo de usarla consigue sumergir al espectador en la diégesis. Sin embargo, al menos en Numb, prácticamente toda la música que se utiliza es instrumental, menos en una escena en la que la letra de una canción diegética se vuelve protagonista.
Hablamos de la escena del bar, cuando la madre de Rosie Larsen, en su momento de mayor desequilibrio emocional, enfadada con su marido y su hermana se aleja para desconectar. La canción de Gerry Rafferty, Right down the line se adueña de la diégesis para envolvernos en una atmósfera que combina tristeza y liberación, acercándonos al estado de ánimo del personaje. Además el estilo pop y el significado romántico de la letra, nos muestra un avance de lo que va a ocurrir. En esta escena y con esta canción como protagonista, se nos presenta una nueva trama y cuyo desenlace se deja entrever en lo que dura el estribillo.
Dejando de lado este ejemplo, el resto de música que se utiliza en el capítulo es música extradiegética instrumental que acompaña a la acción, y que tiene diversas funciones como, por ejemplo, enfatizar la tensión de algunas escenas, así como para transmitir el estado de ánimo del personaje. El uso de este tipo de música tiene una intención muy clara y es la de atraer al espectador, facilitarle el trabajo de identificación con alguno de los personajes o con la propia historia en sí misma.
Para ilustrar este papel fundamental que juega la música en el capítulo, hay un ejemplo perfecto que es la escena que trataremos más adelante en el análisis temporal. En dicha escena, la música extradiegética se erige como protagonista en un momento de reflexión interna del personaje principal. En un ambiente tranquilo y hogareño, la música se vuelve absoluta para acercarnos a los pensamientos y preocupaciones que le vienen a la cabeza al mirar a su hijo. En este sentido, la música permite al espectador experimentar estos sentimientos en su propia piel, sin necesidad de un diálogo que explique la acción, cosa que sin este recurso sería más complicado y daría pie a una identificación más superflua.
En cuanto al nivel sonoro de la serie, en concreto de este capítulo, cabe destacar que predomina un nivel protagonista que, como su propio nombre indica, otorga el protagonismo a la voz hablada (diálogos) que es la que contiene el mensaje verbal. Sin embargo, en algunas ocasiones, este nivel principal de sonido permite que, tanto la música como los sonidos de acción, adquieran protagonismo en la mezcla sonora.
Además, merece mención a parte el nivel de fondo que se le otorga al sonido/voz secundaria. Como hemos hablado, el género policíaco al que pertenece The Killing lleva intrínsecas algunas condiciones determinadas como, por ejemplo, los ambientes de comisaría, de oficinas o de hospital (en el caso del capítulo 2×03). En esta línea, destacar la importancia de este fondo constante y latente, casi imperceptible que nos acompaña durante todo el capítulo y que, además, se vuelve imprescindible para la identificación del espectador con la acción.
Por otro lado, la auricularización utilizada en la serie podríamos decir que generalmente es del tipo neutro, puesto que las voces de todos los personajes tienen la misma intensidad, independientemente del punto de escucha o a la distancia en que se encuentren de la cámara. Sin embargo, hay una escena en la que identificamos una auricularización más marcada, pues el espectador percibe fálicamente el punto de escucha. Hablamos de la escena en la que Holder intenta suicidarse y su compañera intenta evitarlo gritándole desde el otro extremo del puente, aquí el ruido del tráfico tapa la voz de la protagonista, que la oímos lejana como si fuésemos Holder.
Tampoco podíamos dejar de mencionar el uso y el tipo de transiciones entre escenas que se emplean en la serie. Podríamos decir que viendo este capítulo distinguimos tres tipos de transición bastante comunes: fundido a negro, anticipo del sonido y planos cortinilla.
El primero, el fundido a negro, marca el final de una trama y el inicio de otra, en cierto modo nos indica que la trama que ocupa la escena B es diferente a la de la escena A.
Otro recurso muy utilizado es el anticipo del sonido a modo de transición, es decir, aun vemos la imagen de la escena A pero ya entra el sonido de la escena B. De esta manera, podríamos decir que este recurso marca la simultaneidad o la relación que existe entre las dos tramas.
Por último, el plano cortinilla utilizado a modo de plano contexto, que nos sitúa en un lugar determinado en el que se va a desarrollar la acción. Por ejemplo, entre la escena A (interior casa) y escena B (interior hospital) aparece un plano aéreo de la ciudad que se va a acercando al edificio del hospital, nos anticipa qué trama va a ocupar la escena B.
Para acabar, hacer mención a arranque y el cierre del capítulo, puesto que la estrategia utilizada es bastante común en las series de acción. Así pues, el inicio consiste en un previo de las tramas desarrolladas en los capítulos anteriores, acompañado de una serie de efectos electroacústicos que enfatizan los momentos más importantes. Después del previo, arranca el capítulo con la primera escena y después de esta aparece la cabecera, que da paso a la escena 2 y las siguientes. Además, la estructura que sigue el cierre también es común en las series, sobre todo, puesto que se hace un resumen de la situación en que va a quedar cada una de las tramas principales. De este modo, se hace una recopilación de imágenes mudas acompañadas de una música cuya mezcla pasa de preponderante a absoluta, cada corte de imagen muestra el estado en que se encuentra cada trama en el momento del cierre.