Presentación

Autor: Susanna Lluch Roselló

En el presente apartado se analiza el undécimo capítulo de la primera temporada de la serie The Killing, titulado Missing. Este capítulo fue escrito por Veena Sud, dirigido por Nicole Kassell, y finalmente estrenado el 3 de noviembre de 2011. A lo largo de los 44 minutos de duración aproximada de este capitulo, encontramos una música original compuesta por Frans Bak.

La trama de este capítulo se centra en torno a la detective Linden la cual descubre con quien se encontró Rosie, la chica asesinada. Esto lleva a Linden  hasta un casino regentado por nativos americanos, empresa que utiliza el mismo logotipo corporativo que encontraron en el llavero de Rosie. La gerente del casino se muestra poco dispuesta a colaborar en el caso por lo que la detective se ve obligada a pedir una orden, que por desgracia tardará semanas en llegar ya que el casino se encuentra en tierras indígenas. A Linden se le ocurre otra idea para conseguir la orden, pero sin embargo se ve obligada a desviarse del caso cuando recibe una llamada de la escuela de su hijo, alertando de que hace tres días que no aparece por clase. Ella y su compañero Holder recorren toda la ciudad en busca de su hijo Jack, hasta que finalmente lo encuentran.

Se trata de una serie de televisión estadounidense, cuya trama es establecida en la ciudad de Seattle y grabada en su mayor parte en Vancouver, Canadá. Esta serie se clasifica dentro de los géneros de drama, crimen y serie policíaca, pero que a la vez destaca de entre otras series de similar temática gracias la fina narrativa construida en torno a ella. Cabe destacar que esta serie está basada en la serie de televisión danesa Forbrydelsen y que el público al que se dirige son hombres y mujeres mayores de 16 años.

En cuanto a la dirección de fotografía implementada en esta serie, predominan comienzos de escenas con planos muy generales, seguido de planos generales y medios. Los planos cortos son menos abundantes, sobre todo en este capítulo en concreto, donde apenas los encontramos. Predominan planos de la ciudad que sitúan al espectador en el lugar de la acción, sobre todo cada vez que comienza una escena diferente. Por ejemplo, si la detective Linden acaba de llegar a el lugar de un crimen, primeramente se nos situaría en el espacio con un plano muy general del lugar, seguido de un plano del edificio o zona hacia donde se dirige. El tratamiento del color también es algo a destacar ya que predominan los colores fríos y las iluminaciones escasas, cualidades que dotan a la acción de un mayor realismo. Por último, el ritmo de la acción no resulta trepidante como cabría esperar en este tipo de género, en cambio el ritmo viene marcado por la propia tensión y misterio que la trama genera.